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Recuerde, no es un toque de queda: La nueva orden de quedarse en casa sigue provocando polémica

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Una familia camina a lado de un cartel de 'Food to Go' en The Napper Tandy en la calle 24 en San Francisco el 7 de abril del 2020. (Beth LaBerge)

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¿Quién se cree el gobernador Gavin Newsom para decirme que tengo que quedarme en casa? A lo largo y ancho de California, varios residentes se enfurecieron al saber de la nueva orden de quedarse en casa del mandatario estatal.

Cientos de personas se reunieron en la ciudad de Huntington Beach el sábado pasado para protestar en contra de la orden, la cual prohíbe viajes y actividades no esenciales entre las 10 p.m. y 5 a.m. Una manifestación también se realizó en Fresno, pero más chica, con alrededor de 50 personas presentes.

Hasta algunas autoridades han dicho que no van a enforzar la orden.

El hecho de que Newsom asistiera a una fiesta en el restaurante French Laundry, algo que va en contra de las pautas de salud de su propio gobierno, es tan solo una razón porque algunos funcionarios siguen indecisos de aceptar esta nueva restricción. Mientras que para otros, tan sólo la orden por sí sola los molesta.

Marisa Lagos, la corresponsal de política de KQED compartió a través de Twitter partes de lo que el Dr. Robert Wachter, director de la facultad de medicina de UCSF, dijo a KQED Newsroom al respecto la presencia del gobernador Gavin Newsom en una fiesta la semana pasada: "Era un error…no estamos haciendo esto por él, lo estamos haciendo por nosotros mismos, para que no matemos a nuestros seres queridos y que la economía pueda reabrir de nuevo en el futuro cercano".

Otros líderes comunitarios señalan que la frase "toque de queda" no refleja lo que en verdad consiste la orden, ya que existen varias excepciones. Según ellos, el gobierno estatal debe de mejorar la manera en que presenta su mensaje.

Jon Jacobo es uno de los líderes de la iniciativa comunitaria 'Latino Task Force' de San Francisco, la cual está ayudando a contener la pandemia dentro de la comunidad Latina.

"La Ciudad y el Estado a veces enfrentan este reto, poder comunicar sus planes de manera que las personas normales entiendan", dijo Jacobo. "En verdad, no es como si la ciudad fuera a reclutar a un equipo especial para poner orden".

Durante una rueda de prensa el pasado 16 de noviembre, Newsom dijo repetidamente que estaba considerando un "toque de queda" pero los comunicados del Estado que fueron publicados después del anuncio usaban la frase "orden limitada de quedarse en casa".

"El mensaje debe de ser claro", dijo Jacobo.

Más sobre la orden de quedarse en casa

La orden de quedarse en casa estará vigente hasta diciembre 21, pero existe la posibilidad de que sea extendida. Personas que violan la orden podrán ser multados o hasta enfrentar cargos menores mientras que comercios que no cumplan podrían hasta perder su permiso de negocio.

Para ser más claros, la orden tiene muchas excepciones:

  • Las personas todavía pueden ir de compras al supermercado o a la farmacia y también realizar actividades al exterior, siempre y cuando estén solos o acompañados por personas que vivan en el mismo domicilio, como salir a correr o sacar a caminar a su mascota.
  • Los restaurantes pueden permanecer abiertos después de las 10 p.m. para atender órdenes de pedidos a domicilio.
  • Los trabajadores pueden ir o regresar de sus lugares de trabajo.
  • La orden no afecta a trabajadores e infraestructura que el Estado considera "esencial", lo que incluye cuidado de salud, trabajadores de emergencia, industrias alimenticias y agrícolas, los sectores de drenaje y agua, transporte, energía, comunicaciones, gobierno, manufactura y servicios financieros.
  • Además, la orden no aplica a cualquier persona sin techo.

El senador estatal Scott Weiner (D-San Francisco) dice que la manera más precisa para entender la orden es que es una forma de "restringir reuniones".

"Como lo veo yo, tenemos un problema en el estado con fiestas que ocurren tarde de noche. Esta medida está diseñada para prevenir esto", dijo él. "No es un verdadero toque de queda".

La nueva orden propone reducir el impacto de la reciente ola de contagios de coronavirus. En California, el promedio diario de casos nuevos por todo el estado ha llegado a más de 11,450 contagios, lo que representa un aumento de casi 105% de lo que era hace dos semanas, según cifras presentadas por Los Angeles Times.

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Este no es el "toque de queda" que conocemos

La orden de quedarse en casa aplica a 41 condados del estado que actualmente están en la fase púrpura, la etapa más restrictiva de la reapertura económica del estado. Esto incluye a casi 94% de los 40 millones californianos.

Pero aún así, esta orden afecta a menos personas que el toque de queda que se hizo cumplir por toda California durante la primeras semanas de la pandemia el marzo pasado.

Esta nueva orden también es menos restrictiva que el toque de queda ordenado por la alcaldesa de San Francisco London Breed el mayo pasado luego de que se reportaron actos de vandalismo durante las protestas en contra la muerte de George Floyd en las manos de la policía.

Funcionarios de la ciudad en ese entonces sí llamaban a esa restricción como un "toque de queda" y exigían que las personas se quedaran en sus casas desde las 8 p.m. hasta las 5 p.m. por un periodo de dos días. Si alguien salía de la casa, tenía que comprobar a un oficial que ellos iban en camino a casa o a su lugar de trabajo, aparte de otras excepciones.

A pesar de que esta orden de quedarse en casa no es tan estricta que medidas pasadas, sigue siendo algo necesario, dijo el Dr. Robert Wachter, director de la facultad de medicina de UCSF, a KQED Newsroom el viernes pasado.

"El virus está apareciendo por todas partes", dijo él.

Wachter comparó la pauta actual a un regulador de voltaje, una metáfora que Newsom ha utilizado con gran frecuencia para explicar cómo el gobierno estatal está aumentando las restricciones sin retomar un toque de queda completo.

"Es algo razonable confirmar que no vamos a cancelar todas las reuniones. Pero lo que sí diremos es de que si vas a la casa de tu amigo para tomar un trago, eso es un verdadero riesgo", dijo Wachter.

El problema para hacer cumplir las restricciones

Sin embargo, varios funcionarios ya han declarado públicamente que no tienen ninguna intención de hacer cumplir la orden de quedarse en casa.

Esta lista incluye funcionarios de los condados de El Dorado, Fresno, Los Ángeles, Orange, Placer, Sacramento, San Bernardino y Stanislaus. Algunos hasta han criticado fuertemente la medida.

La Oficina del alguacil del Condado de Ventura declaró a través de Twitter su posición al respecto la nueva orden del gobernador Newsom: "La Oficina del alguacil del Condado de Ventura está consciente de la orden de quedarse en casa y el toque de queda que entrarán en vigor el 21 de noviembre del 2020. En resumen, no estaremos exigiendo al público que siga esta orden de toque de queda. Sin embargo, continuaremos respondiendo a llamadas sobre asuntos de la seguridad pública y proveeremos servicios para hacer cumplir la ley cuando se necesiten. Le pedimos a todos que hagan de su parte y eviten situaciones que puedan contribuir a la propagación de covid-19".

"Estamos hablando de un toque de queda que es bastante difícil de enforzar. Nuestros agentes de la ley ya no pueden con más", le dijo el alcalde de Fresno, Lee Brand, a KQED Newsroom este viernes. "No estoy impulsando a otros a que desafíen la orden, pero hay que depender de que la gente cumpla con la pauta de manera voluntaria".

Otras ciudades están tomando un camino distinto.

Se espera que San Francisco baje al nivel púrpura, la fase más estricta, durante los fines de noviembre. Si esto pasa, la ciudad tendría que acatar la orden de quedarse en casa.

El Departamento de Policía declaró que si llegara esa situación, la dependencia usaría una "estrategia de cumplimiento progresista", como se refirió Matt Dorsey, vocero de la Policía.

Esto quiere decir que la Policía educaría primero a individuos y negocios sobre las restricciones, luego pedir que estos obedezcan de una manera voluntaria, y después presentar una advertencia a quienes sigan desobedeciendo las órdenes.

Si aún así una persona sigue violando las restricciones, el oficial en esa situación emitirá una citación.

Por su parte, el Estado podría aumentar las restricciones si no se logra controlar la segunda ola de contagios.

"Si las cosas no mejoran, creo que veremos más [restricciones]", dijo Wachter.

Wachter planea celebrar el Día de Acción de Gracias con su familiares cercanos con quien vive: su esposa y sus hijos ya adultos en una mesa muy, pero muy grande.

La agencia Prensa Asociada contribuyó a este reporte.

Este artículo fue traducido por el periodista, Carlos Cabrera-Lomelí.

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